domingo, julio 22, 2007

En ocasiones se cuela entre los amaneceres para ver su sombra proyectada en las ramas de una palabra

-¿Lo has visto?

Apaga los gestos erguido sobre el vértice.
Mira la punta de la noche.
Se retuerce hasta volverse e(s)tereo.
Las mangas le cuelgan como serpientes.
Su voz es llanura diáfana por la que corre descalzo el viento.
Guarda un universo diminuto enterrado en un hueco.

-¿Has visto pasar el tiempo? -le pregunto al mono.
-No -dice sin mover los labios- hoy tampoco.

lunes, julio 16, 2007

paisajes sin voz se difuminan dentro del círculo de rosas

los señores de la nada
miran hacia dentro
como quien busca en el cielo
un planeta habitado
........hablan callando
........ríen llorando
........sueñan despiertos
........galopan estáticos
su espada es un lazo
su futuro una pregunta
su miedo una jaula
siempre abierta al ocaso
ellos
duermen en la tierra
se alimentan de palabras
cantan a sus huecos
reinventan las tormentas
........rozan como la seda
........hablan la lengua del sol
........vibran siendo cuerdas
........bailan con sus manos
redactores de noticias
de lo que nunca ha pasado
dibujan con los ojos
arco iris dorados
ellos
se entierran en la niebla
respiran manzanas
regalan infinitos
a las noches heladas
........se detienen ante el tiempo
........con el corazón en la mano
........vacían sus rincones
........hasta perder el aliento
sentados en la hierba
son camino de viento
devorando el horizonte
con sus vuelos inciertos

domingo, julio 08, 2007

con los cabellos del río
(lágrimas de árbol)
con las manos del color
(puente radiante)
se reinventan las células
del bosque inconsciente
los acordes se pierden
como cartas nunca entregadas
recostado sobre la sombra
dibujo
inviernos,
allí
mis
alas
nunca
tocan
el
sol

martes, julio 03, 2007

vibran leves las cuerdas del alma inundando de luz la habitación azul cerrada

vive en el ojo del caballo cautivo
una espiral incomprensible de pájaros
sedienta como un río seco
vuela en círculos desgastados
la piel del sol permanece
cubierta de mapas
que ha trazado el tiempo
con delicada contundencia

deliberada arritmia la de sus pasos

dispuestas las naves a zarpar
esperan el disparo del cielo
que con su incuestionable razón
reparte entre sus hijos
corazones de papel
en los que la lluvia escribe
con su mano de agua
y su verbo etéreo

historias transparentes como sueños