miércoles, noviembre 22, 2006

parpadeo


esperé el amanecer
con las palabras brotando como ceniza
las paradojas de una voz que camina
sin paradas
sin silencios
hablándole a las ciénagas
de colores perfectos
de ramos de ternura ebria

esperé al sol
canturreando en voz inmersa
los diamantes que la lluvia bebe

y me habló la arena
en nombre del viento
con melodías que aprendió
besando la sal del mar
en días de luna invisible

me habló la arena y dijo:

-soy lo que sientas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ah, el cosmos.